“Yo soy el primero de sus miembros”
Juan Pablo II
Todas las personas que hacen a la Santísima Virgen la promesa de vivir lo que pidió en Fátima, y que llamamos “Promesa de Amor”, forman y son parte del Apostolado Mundial de Fátima. De acuerdo a los deseos, posibilidades y vocación de cada una, pueden elegir ser:
1. Miembros Ordinarios.
Son quienes han hecho su Promesa de Amor a Nuestra Señora y cuyo único compromiso con Ella, es procurar cumplirla siempre y cada vez un poquito mejor. Es el “Movimiento abierto”, la “Cruzada Mundial” de personas que, unidas en la oración, forman el Ejército Espiritual de María.
2. Miembros Apostólicos.
Son aquellos miembros que, además de hacer su “Promesa de Amor”, se afilian al Grupo Apostólico para promover la devoción a la Santísima Virgen y motivar a que el mayor número posible de personas responda a su llamamiento. Estos miembros se inscriben en alguno de los Centros del Apostolado (Cap V). Pueden ser:
2.1. Militantes. Son los que se comprometen a llevar a cabo alguna actividad particular, a realizarla en equipo y de acuerdo a los estatutos, objetivos y programas del Apostolado. Ellos son:
- Los Dirigentes. Miembros de una Mesa Directiva o coordinadores de una actividad o comité.
- Los Servidores de María. Miembros que realizan las diversas actividades propias del apostolado.
2.2. Auxiliares. Son personas que, además de hacer su Promesa de Amor a la Santísima Virgen, desean colaborar en la promoción del Mensaje de Fátima, pero que, por diversas circunstancias personales (familia, trabajo, estudio, militancia en otro apostolado, enfermedad, etc.), no les es posible comprometerse a desempeñar una actividad fija y continua, pero que, sin embargo, afiliados a un Centro, colaboran en alguno de estos dos grupos:
2.2.1. Los colaboradores eventuales. Como su nombre lo indica, son miembros cuya participación y ayuda al grupo apostólico es llevada a cabo informalmente o de vez en cuando. Por ejemplo:
- Promover el Mensaje de Fátima, la Promesa de Amor y el Grupo Apostólico entre las personas con quienes conviven y tratan.
- Asistir e invitar a otras personas a las Vigilias, retiros o eventos varios.
- Ayudar ocasionalmente o en determinados eventos del apostolado.
- Realizar, cuando el apostolado lo requiera, alguna tarea precisa, limitada y temporal, para la que ellos tienen posibilidades apropiadas.
- Llevar la pequeña imagen de Nuestra Señora de Fátima, que hayan adquirido para tener en su hogar, a visitar algunas familias o enfermos, ya sea porque que ellos los conocen y/o, por petición ocasional de un Centro.
2.2.2 La colaboración espiritual. Integrada por miembros que de manera especial ofrecen su oración, sufrimientos y sacrificios para que la acción de este Apostolado sea fecunda y concorde a los deseos y planes de los Corazones de Jesús y de María (Religiosas de Clausura, enfermos y miembros dispuestos a “dar más”; dispuestos ahacer de suvidauna “continua oración y ofrenda”). Su ofrenda puede ser permanente o se les puede solicitar en ocasiones o proyectos particulares.