Recursos

El Apostolado ES Y DEBE SER una organización exclusiva y totalmente espiritual.

Monseñor Harlod V. Colgan, fundador del Ejército Azul, siempre consideró a Nuestra Señora como el “General” del Ejército, por lo que, en todas las actividades que su Ejército desarrolle en cualquier parte del mundo, debe contarse con su ayuda y guía.

Monseñor tenía un punto de vista muy positivo y al mismo tiempo una actitud firme y decidida respecto al dinero. Su criterio era: “queremos de las personas su compromiso espiritual… nada más”. En particular, estaba en contra de organizar rifas o eventos para recaudar fondos.

Vivan el Mensaje de Fátima y hagan que se viva y Nuestra Señora se encargará de lo demás.

Mons. Harold V. Colgan

La forma más adecuada y satisfactoria de financiar las diferentes necesidades y proyectos es «dar a conocer las necesidades», esa es nuestra única tarea, Nuestra Señora inspirará a aquellos de sus hijos que puedan aportar lo necesario”. Recomendó, también, que nunca se intentara contar con fondos “para lo que se ofreciera”, sino sólo para cada proyecto en particular y aconsejaba no dedicar gran tiempo a tratar asuntos de dinero.

Los lineamientos del Apostolado en México señalan con claridad que no se pueden fijar ni establecer cuota alguna, ni solicitar ni tampoco aceptar donativos y que serán los miembros del apostolado quienes voluntariamente aportarán su tiempo, esfuerzo, capacidad y recursos, en la medida de sus posibilidades y deseos, para satisfacer las necesidades del apostolado.